Es 8 de marzo, Día de la mujer.
Es el año 2.023 y pienso que los textos puestos en marcha en las redes no se parecen mucho a este acontecimiento comunicacional al que asistimos hace 10 años.
20 ni hablar.
Son un montón de voces. Vienen de diversos identidades comunicacionales. Ejemplo de ello son las instituciones, asociadas o no a una causa social, cultural o educativa, saludan a la mujer. Entonces se puede ver que los comercios también saludan a la mujer, los emprendedores.
Y luego las personas. Familiares escriben para saludar, amistades llaman para abrazar. Y publican en sus redes en su nombre o en nombre de su marca, a veces comercial y a veces no, una vocería nomás. Y desde allí saludan también a la mujer.
Este lugar digital, el de los nuevos medios, hoy también agobiado por la guerra. Tanta muerte televisada (expuesta mediáticamente). Deja una pregunta sobre los filtros culturales. Una enorme interrogante acerca de su identidad, su función, sus efectos. Parece que se puede decir de todo, gritar, sin pausa.
¿Qué queda por cuidar?
Y con la misma, la vitrina mediática hoy sin ningún problema se puede ocupar de este otro tema, la mujer.
Traigo esta foto que conseguí, comparto este instante que a mí modo de ver es todo sonrisa. A mí se me ocurre que Amelia está demasiado feliz, hizo algo que deseaba hacer. Está llena de alegría.
Feliz día de la mujer!
1929 - Amelia Earhart en su traje de buceo. Después de explorar aguas oceánicas en Block Island en Rhode Island.
