Una imagen del S. XIX a mi modo de ver tiene mucho aún por decir sobre la maternidad.
Es verdad que la mujer cambió, también la sociedad que le contiene. Sus derechos, sus funciones, su participación en la vida económica y política, incluso en el hogar.
También se renovó lo que tiene que ver con su deseo de hijo, las formas que lo trae al mundo o cría.
Pero en esta imagen, el bebé colgado a ella, la aceptación de este hecho con una naturalidad, da por pensar que el hijo estuvo siempre allí. Y quizás es así, el hijo está allí como acto, hecho, pensamiento deseo.
La imagen también me mueve en cuanto el hijo como futuro. Cuidar de los hijos como si estuviéramos podando, recortando una pieza de una composición mayor que es el tiempo que no habitaremos. Y debe ser tan así que se exige dejar, por el tiempo de la crianza, otros hijos, otros frutos, también gestados: los hermanos mayores, los proyectos, las relaciones. Incluso a ella.
El día de la madre puede ser un alto para el homenaje, una pausa para mirar juntos este
acontecimiento de hacer pie en profundidades que no compartiremos. Mary Cassat "Maternal Caress" 1.890/1.891
