A veces no es que no se quiere, sino que no se puede. Este candado no se abre con llave sino con clave, un juego de números hará la magia.
Si "no soy yo sino tú" de lo que parece hablar es que ambos no hacen match, no hay coincidencia que permita la fusión y la gratificación de lograr algo juntos. No hay juego. Que algo más pase, por la gracia de ambos, parece ser parte de lo que no se puede. Es un encuentro sin encuentro, en soledad. La especificidad de cada uno no lo permite. ¿Y entonces? ¿Hay conflicto o no? Pienso en varias cosas, si se tratara de personas me pregunto qué les hizo juntarse y qué se resiste al encuentro. ¿Necesitaran estar solos? ¿Les imposible acompañarse? ¿Se podrá cambiar? ¿Quieren cambiar? ¿Dónde está aquí la satisfacción o el malestar? El texto pone el acento: No soy yo sino tú. Lo que aqui no pasa entre llave y candado no tiene que ver con lo que se es sino con lo que el otro es. Pero hay algo más y es que el individuo sobre lo que puede aseverar es sobre sí mismo, lo que le pasa al otro en realidad escapa de su control. Es así que el enunciado lo que nos deja es una dolorosa confesión: no eres tú, soy yo y ¿sabes qué? no comprendo porqué. Entre ambos enunciados parece que hay una necesidad, en un caso no conocida pero cobrada y en otro caso conocida y compartida. En el primer caso habrá ausencia, guerra, separación. En el segundo caso cabría una conversación, el consenso y hasta la posiblidad de amar y ser amado sin que para ello sea necesario ser la media naranja. Ilustración de @tangyauhoong #psicoterapia #psicoanalisis #saludmental #modernlove #love #amor #relaciones #divorcio #marriedstory #historiadenunmatrimonio #psicologia #psicoterapeutasvenezolanos #psicologoscaracas #psicologosvenezolanos