top of page

Fantasía


Si sobre el futuro es poco lo que sabemos y las necesidades del presente resultan difíciles de atender la fantasía tiene en este lugar unas posibilidades asombrosas. La fantasía nos trae la escenificación de una solución que permite rescatarnos de estados de ansiedad. Se trata, es verdad, de una recreación, una ilusión. No es la realidad. Lo que sí es real es el efecto que genera. Es como el aliento de mamá frente al dolor de la rodilla lastimada, con sus palabras los fantasmas se alejan, son menos feroces (así la lesión demande alcohol y sutura).

A veces la fantasía tiene efectos diferentes, es incorporada como resistencia. La idea, el anhelo, que se ha construido le mantiene distante de la lógica del problema, inhibe la posibilidad de pensarle. Y allí las consecuencias serán inevitables. Pensar Venezuela no es fácil, se sufre de manera importante. Y sin embargo, le pregunto... ¿no le gustaría fantasearle? Obra tomada de @carluccio7

bottom of page